El ortopeda que atiende desde el marco de intervención de la Relación de Ayuda observa:
- Qué relación mantiene la persona con su enfermedad.
- Qué relación mantiene la persona con el producto ortopédico.
- Cómo piensa y cuáles son sus creencias
- Así como su realidad social.
- Si esta realidad de la persona va a ser un elemento favorecedor en el proceso ortoprotésico, o por el contrario, va a ser un obstáculo generando desmotivación, interrupciones en el tiempo,...
Podemos ayudar al paciente a que aprenda a relacionarse con su realidad de manera que le sea un elemento facilitador para mejorar su calidad de vida.
En tanto que la persona mantiene una relación más amable con su realidad personal: de aceptación y motivación de compromiso en participar en su mejora le ayudamos a que se reconcilie con el producto, a utilizarlo asíduamente, con el objetivo de mejora de calidad de vida y autonomía personal.
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